viernes, 21 de octubre de 2016

Café Society




Ayer por fin,pude ver "Café Society" en el cine.
Dudosa ante varias interesantes alternativas,conforme iba avanzando la película,confirmaba que la elección había sido la correcta.
Ahondaré en la trama sin desvelar el desenlace,quien no quiera adentrarse en el argumento sin haber visto la película,sencillamente,que postergue esta reseña,porque me gustaría invitaros a que compartamos el mensaje que la peli nos deja a cada un@. 

Vaya por delante que me ha parecido una película deliciosa.Bajo un halo de aparente frivolidad,Woody Allen,aprovecha para abordar  los temas que le inquietan,le seducen,le persiguen durante toda su vida y en paralelo,toda su filmografía: la muerte,el amor,la soledad,el sentido de la vida,el destino,el azar.....qué maravilla.


Pero empecemos por el argumento.Café Society está ambientada en el Nueva York de los años 30.
Bobby Dorfman ( (Jesse Eisenberg)vive con sus padres y tiene un hermano gansger.Asfixiado por las peleas de sus padres y las pocas expectativas de futuro para él en la ciudad,decide probar suerte en Hollywood,aprovechando que un tío suyo, Phil ((Steve Carrell),es un poderoso agente que finalmente accede a contratarlo como chico de los recados.


La vida de Bobby dará un giro inesperado desde que conoce a la secretaria de su tío Phil: Vonnie (Kristen Stewart),de la que se enamorará perdidamente a pesar de que ella tiene novio.
Le atrae de ella,además de que es guapísima,su espíritu libre e incorrupto.


Bobby Dorfman,el alter ego de Woody Allen,es un personaje que de primeras enternece:torpe,dulce,como dice Vonnie a modo de cumplido: "tiene la mirada de un ciervo que está a punto de ser atropellado";)


Sus padres,en la película,son Marty (Ken Stott)  que es un tipo brusco pero con una moral clara y Rose (Jeannie Berlin) siempre dispuesta a encontrarle algún defecto a su marido.
Por supuesto son judíos y aunque discuten sin parar,están entregados el uno al otro, y se quieren a su manera.

Bobby huye de todo eso y se va a la meca de los sueños,buscando la ayuda de su tio Phil.
El destino caprichoso pondrá a Vonnie en su camino,de la cual,aún se enamorará aún más al saber que ella en ese momento,no está disponible para él.


Woody Allen aprovecha este punto de partida de un amor no correspondido para hacer un estudio sobre las relaciones sentimentales.Intercambiado los roles de amado-amante  entre Bobby y Vonnie ,Café Society nos muestra además de que manera se puede amar a dos personas a la vez y siempre de manera muy diferenciada.


No somos siempre los mismos,la vida nos cambia,a veces incluso con la misma persona a lo largo de los años, pasamos de desempeñar el papel de amados,dejándonos querer en una relación que nos colma de atenciones y cuidados a desempeñar el rol de amantes que se desviven por agasajar y seducir al otro.



 Y al mismo tiempo,en paralelo,desempeñando uno de estos dos roles,podemos ejercer el rol contrario con otra persona distinta. Es como si esos papeles,el de amante y amado,formaran las dos mitades complementarias y a la vez contrapuestas de uno o dos círculos perfectos.

¿qué satírico guionista ideó este plan en nuestras vidas?

No os perdais "Café Society" tiene una fotografía espectacular,unos actores/actrices que cumplen más que dignamente su papel y como es habitual,una estupenda banda sonora a base de jazz.

Las referencias pictóricas,literarias,cinématográficas,filosóficas,son ya habituales en Allen, y aunque nos quede cierta sensación de melancolía al cierre,lo cierto es que el maestro neoyorkino nos deja una reflexión agridulce en el aire ¿estaremos predispuestos a ansiar siempre lo que no tenemos?¿por qué algun@s de nosotros no se nos da la oportunidad de  vivir dos vidas simultaneamente ?

Café Society lejos de dar respuestas,abre preguntas,como el cine de verdad,ése que nos deja sensipensativos durante días y justo en el momento de salir los títulos de créditos nos deja con ganas de más.

¡Buen fin de semana,cinéfil@s!

Troyana






10 comentarios:

ricard dijo...

Como expuse en mi post, coincido contigo en que tras su apariencia frívola trata temas muy profundos. Quizá demasiados, me pareció un tanto dispersa. Pero celebro que te haya gustado; es una película abierta a muchas lecturas y la tuya es pertinente y muy interesante. Lo que más me gustó fue el final, el que abre esos interrogantes que destacas en tu entrada.

Un abrazo.

TRoyaNa dijo...


Ricard,
mi lectura por supuesto es personalísima y subjetivísima, pero a mí la película al margen de parecerme a nivel visual,un auténtico regalo para los sentidos con esa maravillosa fotografía y esa banda sonora tan sugerente,me abrió como suele ocurrir con Allen,muchos interrogantes a cerca del amor y en ocasiones de su falta de sincronicidad.
A mí me gusta compartir con vosotros todas esas dudas,a ver si entre nosotr@s logramos arrojar alguna luz en todos enigmas vitales;)
Un abrazo también para ti:)

atikus dijo...

Coincido plenamente contigo TRoyana, y es que woody es un mago de las relaciones personales ademas de hacerlo con ese estilo y la fotografía, la música...bueno, no me voy a repetir :-)
abrazos

TRoyaNa dijo...

Atikus,
es un maestro de las relaciones personales y también un mago,como bien dices.
"Café Society" ha superado todas mis expectativas.
Es una deliciosa película que te hace sentir,pensar,reflexionar....no pude salir más satisfecha del cine.
Abrazos

Teo Calderón dijo...

En “CAFÉ SOCIETY” nuestro Woody regresa una vez más a ese territorio tan querido por él (y por muchos de nosotros) de la comedia romántica. Pero hablar de comedia romántica tratándose del autor de “ANNIE HALL” significa también la utilización de ese registro para bucear en muchos de aquellos aspectos del comportamiento humano que le hacen víctima casi siempre de sus propias contradicciones, del sinsentido del amor y de la cegadora locura cuando se funde con el deseo, de los bandazos de la vida, del paso del tiempo y las circunstancias que nos hacen cambiar, de las corrientes que nos empujan a variar de rumbo, del azar y sus imprevistas consecuencias.
Asimismo, “CAFÉ SOCIETY” se convierte, como “RADIO DAYS”, “LA ROSA PÚRPURA DEL CAIRO” y “BALAS SOBRE BROADWAY”, en crónica de una época -los años treinta- por la que Allen siente una nostálgica predilección y hacia la que efectúa en aquellas y en la de ahora un evocador viaje cargado de referencias estéticas y cinéfilas no exentas de un severo y revelador decapado de la esmaltada superficie del sueño americano (tan difundido en la sociedad americana de entonces) dejando al descubierto lo que se escondía bajo el glamour, la celebridad, las grandes mansiones, los locales de moda, las burbujas de champagne y la música de jazz, en un nítido acercamiento al universo de Scott Fitzgerald.
Hay una historia central, la del joven Bobby (Jesse Eisenberg) que llega a aquel Hollywood dorado tratando de buscar una salida a la monotonía y la mediocridad de su vida en el seno de una familia judía de Nueva York (de nuevo Allen aprovecha la ocasión para sus imprescindibles puyas a la religión) y su encuentro con Vonnie (Kristen Stewart), la muchacha que pretendía llegar a ser una estrella y hubo de conformarse con ser la secretaria y amante secreta de un endiosado representante de estrellas. Sobre este eje, alternando Hollywood y Nueva York, la película se despliega de manera intermitente en varias historias secundarias que en lugar de diluir la atención sobre el tronco del relato, merced a ese talento especial que posee Allen para dotar a lo más grave de un aspecto liviano, asistimos a un prodigio de narrativa ingrávida y elíptica, casi musical, contribuyendo así a dotar a la película de un ritmo y una claridad expositiva que facilita la comprensión de unos personajes y sus circunstancias y de cómo éstas sabotean sus sueños y aspiraciones. No siempre huyendo de la soledad y la tristeza se llega a alcanzar la felicidad. De hecho, pocas veces ocurre, ni siquiera cuando crees tenerla delante. Esa última parte de la película, cuando la comedia ya ha dejado paso a un aterciopelado drama (¿recordáis los últimos quince minutos de “ESPLENDOR EN LA HIERBA”?) nos deja un poso de melancolía y -si nos identificamos con Bobby y Vonnie-, una sensación de fracaso por el bien perdido.
Un abrazo.
P.D.– Ah! una nota a esa reflexión final de la película que reproduce Troyana: "¿por qué a algun@s de nosotros no se nos da la oportunidad de vivir dos vidas simultáneamente?" Pues bien, en cierto modo, el mismo Allen dedicó uno de sus mejores trabajos, "MELINDA Y MELINDA" en el que desarrollaba la respuesta a esa pregunta filosófica que, por cierto, también nos la respondió Edgar Neville muchos años antes en su "LA VIDA EN UN HILO".

TRoyaNa dijo...

Teo Calderón,

en efecto en Café Society,los cambios,el azar,las casualidades que hacen variar el rumbo de nuestras vidas vuelven a estar presentes.
Da la sensación de que el viejo Allen se ríe de nuestro vano intento de controlar nuestras vidas,siempre hay circunstancias que se confabulan para jugar con nosotros y para ponernos los planes del revés.También,como no,en el amor,en las relaciones,que es uno de sus temas estrella.

De paso,aprovecha para darle un buen repaso a la hipócrita sociedad hollywoodiense de los años 30,superficial,materialista con la doble moral necesaria para no dejar de enriquecerse y al mismo tiempo aparentar ser miembros respetables de la sociedad.

Y sí, parece como si la vida saboteara a veces nuestros sueños y nuestros deseos,como si estuviera escrita por un guionista canalla y cínico que lo único que pretende es poner a prueba nuestra capacidad de frustración y de resiliencia.

El viejo Woody se pone nostálgico al final,y deja en el aire la reflexión de que la felicidad a veces de escapa de nuestros dedos,que es como una brisa fresca en un caluroso día de verano,aparece y desaparece a su antojo,ajena a nuestra extrema necesdidad de amar y ser amados.

Es una lástima no disponer de dos vidas,ya lo sugería también Milan kundera en "La insoportable levedad del ser" somos siempre principiantes,no podemos aprender de la experiencia,porque para eso, tendríamos que vivir dos veces,e improvisamos y nos decantamos ante una opción en un cruce de caminos,sin saber jamás si hemos optado por la mejor opción en la elección.

Un abrazo


Manderly dijo...

A mi no me ha impresionado tanto. Sí que me ha gustado la historia y toda la parte técnica de la película pero como los dos actores principales no son de mi gusto, no es de las que más me ha gustado de Allen. A veces les coges cierta antipatía a los actores y ocurren estas cosas...
Saludos.

TRoyaNa dijo...

Manderly,
pues sí Manderly,a veces pasan estas cosas.
A mí a priori,no son dos de mis actores favoritos, pero aquí sí me parece que cumplen dignamente su papel.
En el caso de ella,en concreto,a mí particularmente me hizo olvidar que era la protagonista de la saga "Crepúsculo", y me pareció bastante creible su interpretación.
Saludosss

ethan dijo...

Woody Allen en plena forma, de lo cual nos alegramos. Creo que la fotografía es de lo más destacado y en general coincido con tus apreciaciones.
Saludos.

TRoyaNa dijo...

Ethan,
los seguidores de Allen estamos de enhorabuena,para mí fue más que grata la sorpresa,ojalá nos tenga reservadas muchas más.
Saludosss